Hace unos meses murió una tía abuela mía, la pobre mujer ya contaba noventa y seis primaveras y tenía muchos achaques, la tía no tuvo hijos nunca así que yo quedé como su heredera, cuál fue mi sorpresa cuando descubrí que me había dejado un buen pellizco que tenia ahorrado, además de la casa, madre mía no me lo podía creer, yo propietaria de una vivienda en uno de los mejores barrios de la ciudad, la casa estaba bastante deteriorada, casi que lo más rentable sería echarla abajo y volver a construir, o incluso venderla para obtener un buen beneficio, pero es que me gustaba mucho esa casa así que me decidí por arreglarla con el dinero que la tía me había dejado.
Yo no tengo ni idea de cuanto vale construir una casa por eso me puse en manos de profesionales del sector de las reformas. Ellos me indicaron como reformar la casa sin necesidad de llevar una pala para tirarla entera, descubrimos que la mayoría de los muros y las vigas estaban en perfectas condiciones y que no hacía falta tocarlas en absoluto, lo mismo pasaba con la estructura de la parte alta de la casa ya que son dos plantas más un ático en el que yo jugaba de pequeña, las puertas corrieron la misma suerte, se podían lijar y barnizar y aprovecharlas ya que eran puertas de madera maciza y no están muy mal, las ventanas sí que las cambiaríamos ya que entraba el aire por todos lados ya que no cerraban bien.
Gracias a la buena reforma que le íbamos a hacer a la casa se iba a revalorizar, podría llegar a costar el doble de su precio, si lo miramos como una inversión, podríamos sacarle un buen beneficio a la venta de la vivienda, lo que pasa es que cuando decidí arreglarla, lo hice con miras al futuro, me veo viviendo en esta gran casa, junto a mi marido y a la familia que quiero formar en un futuro próximo, es una casa familiar, llena de recuerdos y lista para que formemos mas, los recuerdos de mi familia, en la que pasaremos las navidades todos juntos recordando a la tía y la generosidad que demostró dejándome la casa y el dinero suficiente para poder arreglarla, de no haber sido así, tendría que haberla mal vendido y eso si que hubiese sido una pena.